¿Cómo preparas a tu hijo para enfrentar la ofensa verbal, o física, o el abuso a su mundo emocional?
En primer lugar, ASUMIENDO QUE LOS PADRES SOMOS SUS MAESTROS DEL BIEN. Que son encargados de hacer de ellos personas seguras de su valía y propósito de existencia, más allá de toda circunstancia de apariencia, estatus religioso, socioeconómico o cultural.
No podremos evitar que otros individuos heridos emocionalmente, se vuelvan agresores; no depende de nosotros. Pero si podemos formar hijos cuyo mundo interior reboce de salud mental: todas cuestiones relacionadas con valores como el respeto, la honradez, la generosidad, la empatía, la misericordia, el perdón, el servicio desinteresado, etc. Asuntos que formarán en nuestros hijos tal riqueza emocional, que será una verdadera «valla» de protección contra otros que, a diferencia de los nuestros, carecen de esa fuerza interior por padres (heridos ellos mismos) ausentes, abusivos, irresponsables, indiferentes; que sin embargo se han atrevido a engendrar hijos, de los cuales no se han hecho responsables, realidad evidente en millones de niños en situación de calle, así como de otros tantos que deambulan en los más caros colegios
AME ACEPTANDO A SU HIJO. Recuérdele a diario, cuán valiosa le es su vida.
Escriba cartas, envíe mensajes de texto (a los mayores), cante canciones, juegue con ellos, y no permita que nadie más le «robe» el privilegio de ESTAR en sus vidas.
Tanto amor, formará una protección emocional tan fuerte y firme en su alma, que podrá hacerle fuerte y valiente, tanto como para no ofender ni humillar a nadie; al tiempo que le impedirá ser herido por los realmente heridos.
Lic. Eunice Aguilar N.